Con la Feria Internacional del Libro a la vuelta de la esquina, Buenos Aires multiplica excusas, en estos días, para cruzar el charco con una lista de tentaciones a mano. Los que elijan escaparse al menos por un rato de los circuitos más trillados, querrán saber que en Villa Devoto Mecha espera con los fuegos de la cocina y el diseño bien encendidos.