CHECK IN: HASSEN BALUT

El diseñador de interiores que tiene en sus manos el futuro Cipriani de Punta del Este es también un viajero conectado capaz de responder un cuestionario desde un barco que ahora mismo navega por el Egeo. Nacido en La Plata y afincado en Montevideo desde hace décadas, Hassen Balut despacha aquí sus gustos mundanos en 20 respuestas.

Por el Nilo, en modo lento.

Para empezar, ¿cuál es el primer viaje fuera de fronteras que atesora su memoria?

Un viaje de surf con amigos, a los 15 años, a Montañitas, en Ecuador.

¿A qué lugar del mundo quisiera volver una y otra vez?

A Río de Janeiro, en Brasil, y al Nilo, en Egipto.

¿Cuál es el mejor hotel en el que se haya alojado?

Cipriani Venecia.

¿Y el mejor restaurante en el que se haya sentado a comer?

El Harry’s Bar de Venecia.

Describa el almuerzo o la cena más memorable de su último viaje.

Fue en Kiki’s, en Mykonos, Grecia.

Evoque un museo, un cuadro o cualquier otro encuentro con el arte que lo haya conmovido especialmente andando por el mundo.

El Gran Museo Egipcio de Giza.

Mencione un libro, una película y/o un disco que lo hayan inspirado a viajar a algún lugar.

En cada viaje me gusta embarcarme en la música local. Ahora estoy en Bodrum, Turquía, escuchando un clásico del mundo árabe, Nassam Alayna El Hawa, cantada por Fairuz, una cantante libanesa.

¿Qué destino lo desilusionó por completo o no estuvo a la altura de sus expectativas? ¿Por qué?

No me ha pasado: antes de viajar estudio muy bien el lugar y su historia.

¿Qué es lo que no puede faltar en su valija cuando sale de viaje?

Un foulard. Se puede usar en la noche si refresca o de día para cubrirse la cabeza por el sol.

Mencione uno, dos o tres souvenirs de viajes que ocupen un lugar importante en su casa y en su corazón.

Una escultura en madera de una mujer guatemalteca, un cuadro en madera comprado en Atenas y una bandera de Córcega.

El viaje perfecto es: ¿solo, en pareja, en familia, con amigos o en grupo?

Depende de la edad. A los 15 con amigos, de mochilero y surfista, fueron viajes increíbles. En pareja y familia, siempre.

¿Cuál es, para usted, la calle más linda del mundo?

Ufff… ¡todavía no conozco tanto para semejante pregunta!

¿Un rincón del planeta especialmente recomendable para deslumbrar la vista?

El paisaje desde el Hotel Old Cataract, en Aswan, Egipto.

¿El olfato?

El Mercado Central de Atenas

¿El oído?

El Cairo al atardecer, con el llamado a las mezquitas desde los megáfonos.

¿El gusto?

Italia, por su comida.

¿Y el tacto?

Los antiguos baños turcos de Estambul, con sus mármoles porosos y su humedad.

Si pudiera convencer a una celebridad internacional, de cualquier tipo, para que lo guiara por el lugar donde vive, ¿a quién elegiría y qué le pediría que le mostrara?

Hay muchos, pero me hubiera gustado poder hacerlo con Picasso y con Oscar Niemeyer. Y en el mundo antiguo, con los mayas o con Cleopatra.

¿Cuál es el destino pendiente que ahora mismo lo obsesiona?

Polinesia.

Cuando vuelve de viaje Montevideo le parece…

Me da paz. Es el lugar que elegimos con mi mujer para criar a nuestros hijos. Uruguay es único: su escala y su gente es todo. La simplicidad.