BRINDIS EN SIDNEY
En uno de los barrios más antiguos de Sidney, el flamante bar y bistrot Tilly May’s recupera no sólo un viejo edificio sino además una sabrosa historia: la de dos mujeres que supieron controlar el mercado negro de la ciudad. Pasen y beban.
La cita es un viejo espacio de Surry Hills. Para ser más exactos, unos 180 metros cuadrados (ubicados en el piso superior de un bar que data de 1882), cuya remodelación corrió por cuenta del estudio local Alexander & Co. Además de aprovechar los techos de doble altura y los materiales nobles, los creativos bebieron de otra fuente: la singular historia de Kate Leigh y Tilly Devine, dos mujeres del hampa que dieron que hablar en la primera mitad del siglo XX y cuya época, dicho sea de paso, inspiró también el nombre y la puesta en escena del lugar.
Un bar, un comedor privado y un lounge integran la propuesta, donde conviven espacios más amplios y luminosos (gracias al techo retráctil que se agregó con la obra) y otros más pequeños y oscuros. Piedra, ladrillo y metal dan la nota predominante, y envuelven un diseño de interiores en el que destacan los muebles vintage y los coloridos tapizados. Llegada la hora de ordenar, una amplia carta de cocktails, cervezas y vinos es lo primero que llega a la mesa, donde también cabe esperar entradas varias, hamburguesas, carnes y frutos del mar.
¿Qué dirían aquellas dos célebres damas del crimen organizado?
