LUJO AL NATURAL EN RUANDA

Es la más reciente apertura del grupo Singita, que redefinió el arte de acampar y de los safaris en África. Con el nuevo Kwitonda Lodge redoblan la apuesta a un turismo de lujo que respeta el medioambiente, fomenta la interacción con la cultura local y consiente todos los caprichos del viajero. Incluyendo un encuentro con gorilas.

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Emplazado en el norte de Ruanda, dentro del Parque Nacional de los Volcanes, el flamante Singita Kwitonda Lodge despliega apenas ocho suites. Eso sí: cada una tiene su propia piscina climatizada, chimeneas dentro y fuera de la habitación, duchas interiores y exteriores y, sobre todo, enormes ventanales para no desperdiciar ni un centímetro del paisaje. Piedra volcánica, canto rodado, techos tejidos, cerámicas hechas a mano, ladrillos de terracota y telares confeccionados por artesanos locales dan la nota en el diseño interior, también alegrado por esculturas y obras de arte aquí y allá.

El compromiso con el ecoturismo está presente en los pequeños y los grandes gestos: desde el énfasis en la gastronomía local, apoyada en los ingredientes siempre frescos que provee la gran huerta del establecimiento, hasta el militante trabajo del vivero Akarabo, comprometido con la reforestación del hábitat de los gorilas de montaña en peligro de extinción.

Masajes en la habitación, baños de barro caliente, dos boutiques para compras y una bodega siempre abierta para catas de vino completan los encantos puertas adentro, aunque aseguran que nadie querría perderse el atractivo de las vibrantes calles de Kigali, la capital del país, donde puede visitarse no sólo el famoso Memorial del Genocidio sino además un puñado de buenos museos, restaurantes en los que probar la mejor comida de la región y hasta animados bares con música en vivo. Los que no quieran aventurarse hasta allí pueden optar por una visita a las aldeas vecinas, con sus mercados y sus fiestas tradicionales; o aventurarse en los bosques y los lagos que hoy contribuyen a colocar a Ruanda en los itinerarios por África oriental preferidos de los viajeros occidentales de buen bolsillo. 

En cuanto a los precios del lujoso lodge, arrancan en los 1.650 dólares por persona y por noche (en temporada baja) e incluyen todas las comidas y bebidas, a excepción del champagne francés. Ir al encuentro de los gorilas en la montaña también tiene su precio: 1.500 por persona, pero los guías aseguran que ese trekking puede llegar a ser la mejor experiencia de vida silvestre jamás imaginada y justificar por sí misma el viaje a Ruanda. Hay programas más accesibles, claro: el trekking para avistar monos dorados (100 por persona) o el ascenso a la tumba de Dian Fossey, por apenas 75. Y sin costo alguno, en el Conservation Room del hotel se puede apreciar el equipo con el que el célebre fotógrafo Robert Ian Martin retrató a Fossey estudiando a los gorilas para la National Geographic.

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