AMSTERDAM TIENE SU SOHO
Aún no se habían acallado los ecos de la apertura de un nuevo hotel de la cadena Soho House en Londres cuando el grupo vuelve a dar la nota, ahora en Amsterdam. El estreno tiene lugar en un icónico edificio de los años 30, que se alza orgulloso en el corazón de la ciudad de los canales.
El flamante hotel tiene 79 habitaciones y suites, distribuidas en tres pisos. Como en otros templos de la firma, también hay un restaurante Cecconi’s y un Cowshed Spa, que en este caso va a funcionar en la planta baja. En el cuarto piso se abre lugar al gimnasio y a la sala de proyecciones (otro sello de la casa, que conviene recordar nació originalmente como un club privado), mientras el quinto piso alberga la House Kitchen. Por encima de todos ellos, el infaltable rooftop bar y una pequeña piscina, ambos en una terraza que rodea el edificio entero y en consecuencia ofrece vistas de toda Amsterdam a la redonda.
En cuanto al edificio, no se trata de uno cualquiera. En una esquina de la pintoresca Spuistraat, el Bungehuis es un monumento histórico de la ciudad con una rica historia y una arquitectura muy particular: conjuga elementos del Art Déco, el funcionalismo y la Escuela de Amsterdam, y fue sede primero de una empresa comercial y más recientemente de una escuela universitaria. Afortunadamente, esos destinos protegieron la estructura del edificio con agregados exentos, y el reciclaje a cargo del hotel pronto dejó a la vista tesoros originales entre los que se destacan paneles de madera, frisos de mármol y revestimientos de coloridos azulejos.
Los detalles de época se prolongan en los marcos de bronce de las ventanas, en las barandas de las escaleras e incluso en el interior de los ascensores, y se replican deliberadamente en el diseño de los textiles que abrigan las habitaciones. Para estar aun más a tono con Amsterdam, el hotel también dispone de 75 bicicletas.
