CROACIA DE PELÍCULA
Pasó el Mundial pero seguimos hablando de Croacia. Y ahora la culpa no la tiene su presidenta, sino Hollywood. Nadie irá a ver la secuela de Mamma Mia con grandes expectativas cinéfilas, pero los cazadores de paisajes querrán saber que buena parte de la película está rodada en Vis, una pequeña isla de la costa dálmata.
Here we go again. Así se llama, en rigor, la segunda parte del exitoso film de 2008 que puso a Meryl Streep a cantar bajo el sol de Kolokairi, una isla griega de ficción encarnada, en realidad, por la encantadora Skopelos. Para este segundo capítulo bañado por temas de Abba, el honor de recibir al equipo de filmación corrió por cuenta de una isla croata: Vis, lo suficientemente alejada de las visitadas costas del país como para mantener cierta calma aun en temporada alta.
La pequeña localidad de Komiza, la bahía de Barjoska y la playa Stiniva aparecen más de una vez en el film, al tiempo que un restaurante local de mariscos y una pizzería fueron disfrazados para convertirse en taberna griega el uno y en mercado callejero la otra.
La prestigiosa revista de viajes británica Conde Nast Traveller informó que, a falta de buenos hoteles en la isla, la mayor parte del elenco y del equipo técnico se alojó en yates y en villas privadas. A tales efectos, y por si alguien quiere imitar a Cher, Andy García, Colin Firth o Pierce Brosnan, recomiendan el sitio web Visvillas.com A la hora de comer, el Oscar se lo lleva el restaurante Pojoda, que se ha ganado fama como el mejor de la isla.